…o cómo los juegos conversacionales entrenaron nuestras mentes para hablar con máquinas.
“Yo aprendí prompt engineering jugando Monkey Island”
Por Francisco Morell (jupiter_tonante)
A veces pienso que todo empezó cuando tenía doce años, frente a una pantalla fosforescente que parpadeaba más que razonaba. No había conexión a Internet, pero sí una más profunda: la que se establece entre el jugador y un mundo hecho de comandos, verbos y objetos imposibles. “Usar pollo de goma con polea en cable”.
Esa línea, escrita con la solemnidad de quien invoca un hechizo, me abrió la puerta a una lógica que hoy reconozco como mi primer prompt engineering practice.

